Moby a su bola

Moby está en un punto de su carrera en que hace lo que sale de las bolas sin importarle la trascendencia o el éxito. Su reinado electrónico en los noventa hace que se pueda permitir ese lujo porque tiene la jubilación asegurada y fuera de modas o tendencias, ha seguido publicando discos y canciones aunque mucha gente no se haya enterado. En este blog no pretendemos estar al borde de la más rabiosa actualidad y podemos dedicarle el tiempo a alguien a quién admiramos y por el que siempre vamos a tener la curiosidad de escuchar sus trabajos. De hecho, tras un disco de música ambient,  este mismo año editó Resound NYC Version, un trabajo donde versiona canciones propias pero con arreglos orquestales y corales. Tan es la cosa así que ha publicado con el prestigioso sello de música clásica Deutsche Grammophon y aunque el resultado no cambiará la historia de la música, hay canciones que harán que merezca la pena una escucha (o dos). Es el caso del nuevo single donde escoge a una de las mejores voces de la actualidad (el grandísimo Gregoy Porter) y lo suma a un acompañamiento coral tan épico y unos arreglos orquestales tan epatantes que dan ganas de conquistar un nuevo planeta. Sube el volumen porque esto hay que escucharlo con los tímpanos bien abiertos.

 

 

El disco es (de nuevo) una declaración absoluta de amor a su ciudad, una Nueva York que en los vídeos aparece retratada con un brillante blanco y negro y que nos deja algunos trabajos adiovisuales tan chulos que bien merece la pena que les eches un vistazo.

 

 

Para Resound NYC Version ha cuidado especialmente la elección de voces que lo acompañan y podemos encontrar interpretaciones que ponen los pelos como escarpias. Es el caso de Lady Blackbird en esta versión sensual, sugerente y enigmática.

 

 

Aunque también ha dejado huevo para vídeos más coloridos como es el caso de  ‘South Side’

 

1 comentario en “Moby a su bola”

  1. ¿Como te dejas la maravilla de ‘Rescue Me’?
    Ese sonido maravilloso.
    Siempre me ha acompañado desde que escuché ‘Go’ con un gran pedo, en Ibiza (no recuerdo el garito) en 1991….

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