Sabéis quienes me leéis que casi nunca escribo desde la asepsia, normalmente lo hago sobre asuntos que despiertan un verdadero interés en mi o, directamente, me conmueven de alguna manera y este es uno de esos casos. Hace ya algunos años que conocí al protagonista de estas palabras. Una persona de profunda sensibilidad que vuelca todo su ser en cada una de las obras que construye, tanto las de su parte tradicional como las de su faceta más electrónica. Es de esta última de la que va a tratar el tema de hoy.
Lifelong Corporation es la firma tras la que habita Albert Roda, un músico de formación clásica que viene desarrollando una de las carreras musicales más completas que conozco. Tan solo hay que darse una vuelta por su cuenta de Soundcloud para hacerse una idea.
Por circunstancias de la vida que no vienen al caso hemos estado sin contacto durante casi una década, pero tan solo han hecho falta buenas intenciones y un puñado de palabras para retomar aquello que se truncó de un modo tan absurdo.
He tenido poco tiempo para escuchar algunas de sus obras nuevas, las más antiguas ya las conocía, pero me he quedado prendado de una que acaba de publicar. Además me gusta doblemente porque es una de las pocas veces en las que entrega su propia voz. Y no es cualquier cosa porque, aunque ya la tenía casi lista, ha tardado prácticamente los mismos años que estuvimos de espaldas en sacar a la luz Black Tears.
Así que nada, aquí traigo esta maravilla en cinco versiones distintas.
Mil gracias por esta reseña y todo lo escrito.
El abrazo más grande!