La actriz lesbiana Ellen Page se fue a Brasil a entrevistar al que puede ser próximo presidente de Brasil. Activista por los derechos LGTBI desde que salió del armario, su cara ante las respuestas y perlas del impresentable es la cara de toda persona con un poco de humanidad, porque si no te asustan las barbaridades que dejó caer el impresentable, es que tienes un serio problema. Si este tío gana las elecciones de un país de doscientos millones de personas, los que vamos a tener un serio problema en el mundo, amiguis, somos nosotros.
«En 1988 incursioné en política, y desde entonces me tildan como un gran homofóbico en Brasil, y se equivocan. Mi lucha siempre será contra la distribución de material LGTB para niños mayores a 6 años, eso es todo».
«No voy a mirarla y pensar ‘creo que es gay’, no me interesa. Usted es linda. Si fuera un cadete en la academia militar y la viera en la calle, la silbaría, porque es muy bonita».
«Cuando era joven, había pocos gays, con el tiempo, debido a las libertades, a las drogas, y con las mujeres trabajando, aumentó bastante el número de homosexuales»
«Los gays «están escapando de la normalidad» y hace falta tener un Norte»