Les decimos a los niños que los monstruos no existen. Para que puedan dormir.
Porque si les dijésemos la verdad, que sí existen, que están entre nosotros bajo la apariencia de respetables ciudadanos y de valiosos miembros de la comunidad, no volverían a pegar ojo en su vida.
Jimmy Savile (el tipo de la foto) fue un popular presentador de la BBC. Murió en 2011. Después de su muerte, y a raíz de diversas denuncias, empezó a hacerse público que el caballero en cuestión -caballero, sí, la reina de Inglaterra le concedió el título de sir– fue durante toda su vida un depredador sexual del que se sospecha que pudo llegar a abusar de hasta 200 víctimas desde 1955. La mayor parte de ellas, además, menores de 18 años.
Diversos informes han desvelado que Savile cometía sus abusos, sin contemplaciones, en las dependencias de la BBC y también en hospitales y otros centros médicos a los que acudía como benefactor. Dicen que era, además, recibido con los brazos abiertos por los mandamases de los hospitales a los que acudía. Y que se paseaba por allí como si todo aquello fuese suyo.
Y jamás fue objeto de una investigación policial o judicial.
Parece difícil de creer que durante todo ese tiempo nadie pudiera hacer nada al respecto. Un monstruo rodeado de ciegos que durante casi 60 años no vieron, O no quisieron ver.
Evidentemente no quisieron ver, porque era sobradamente conocido en Inglaterra. Lo que me lleva a preguntarme qué sabia el para que el resto de los poderes «establecidos» callaran y no desvelaran este secreto a voces…
Da mucho miedo y mucho asco!!
Lo de este tío es tan disparatao y truculento que no hay obra de ficción que sea capaz de retratar a semejante monstruo enfermo.
Y esperate a que salga lo de Benny Hill.