Terminada la primera temporada y tras un último episodio espectacular, le doy más que un aprobado a Mar de plastico y la convierto en la tercera serie española del 2015 (junto a El Ministerio del Tiempo y Vis a Vis) que ha pasado la línea de la mediocridad para entrar de lleno en la lista de mejores series del año. Un escalón por debajo que las otras dos que nombro, pero merece estar en ese triunvirato.
Perfecta no es, está claro. Tiene a Rodolfo Sancho, un prota que da lo justito. Tiene a Jesús Castro…
…ese actor cuya increíble fotogenia es inversamente proporcional a lo rematadamente mal que actúa. Tiene un guión que ha dado demasiadas vueltas sobre ciertos asuntos (hasta el papo del flashback de Afganistán!). Tiene un niño repelente al que han dado ganas de matar en cada episodio y sin embargo…Ha molado…¿Cómo es posible? Pues son varias razones:
– El color; algo tan tonto como los filtro amarillos, ocres y naranjas que se asocian al calor, el sofoco y la sequedad le ha dado a la serie un aspecto y un espíritu persona muy carácterísticol, que no es poco.
-El thriller geográfico. Primero fue La isla mínima y ahora Mar de plástico, la cuestión es que parece que por fin la ficción española ha descubierto que la península tiene escenarios originales y nada explotados para urdir una trama de misterio y asesinatos. Hay que reconocer que le han sacado todo el potencial a los invernaderos, las playas y los desiertos almerienses.
-El reparto multicultural. Como decía arriba, unos actores mejor y otros peor, pero por fin una serie se ha dedicido a mostrar una realidad que cada días es más evidente con gitanos, subsaharianos, magrebíes y rusos ¿Qué tú no le ves el mérito? Pues vale. Pero es la primera vez que una serie española lo ha hecho. Que conste.
– Por Pedro Casablanc y Patrick Criado, dos monstruos de la actuación que en el último capítulo dieron una lección de arte dramático de muchos kilates y altura, en un duelo a muerte de los que merecen premio (uno en la madurez actoral, otro con la frescura y la intuición que da la juventud ).
-El cliffhanger en el último minuto de la temporada. Un triple salto mortal que demuestra ganas de riesgo y de apostar por lo difícil, porque hay que tenerlos muy bien puestos para acabar así y que mole.
Lo has clavado. Es una serie fantástica, que nos ha tenido los 13 capítulos con el alma en vilo para descubrir quién era el culpable. Al final se ha resuelto perfectamente el círculo, y la figura del asesino encaja perfectamente con la trama de trata de blancas descubierta poco a poco a lo largo de la serie. El bestial cliffhanger que comentas parece presagiar que lo que pasó en Afganistán aún tendrá influencia en la próxima temporada… es cierto que lo de Jesús Castro es de juzgado de guardia, y empaña algo el conjunto, pero a mi la Nimri me genera sensaciones similares (debe ser la manía que le tengo a esta polifacética artista que no destaca en nada), aunque no sea tan mala actriz como el gaditano.
Personalmente me ha gustado más Mar de Plástico que Vis a Vis por esos maravillosos exteriores que la hacen más entretenida y porque trata mejor y con más realismo el conflicto étnicos (bien entre payos y gitanos, bien el conflicto entre jornaleros subsaharianos y de otras nacionalidades, o entre españoles filonazis con subsaharianos). Lo de Pedro Casablanc no debería extrañarnos, ya que ha sido recientemente nominado a los Goya por la peli de Bárcenas. Y la actuación de Patrick Criado en el último capítulo es de las que hacen historia.
Bravo.
Para mí hay varias diferencias que hacen que VisaVis esté muy por encima. El reparto en la serie carcelaria está muchísimo más ajustado en talento que en Mardeplastico, donde hay al menos tres actuaciones que chirrían lo que no está visto. Luego tenemos el guión y la trama; en Mardeplastico han repetido el flashback y las pesadillas del prota en toooodos los episodios; ha dado pinta un poco de relleno.
Y hay varios errores de guión, aunque sean perdonables, como…¿No se habían hecho pruebas de ADN? Como no cayeron en la cuenta de lo que se descubre en el episodio final?
La verdad es que estoy de acuerdo en todo todo…
No soporto a los 2 mencionados..
Con el cliffhigaitas ese puede que echemos de menos las conversaciones surrealistas que tiene/tenía ese personaje… sin quererlo eran cómicos… de verdad… cosas como…
– No entiendo que está pasando. — Mientras gira hacia la puerta y dice – ¿qué esta pasando?
Muy FANS… pero ahora igual ya no…
La verdad que volviendo a lo mismo. lo del personaje del Sr. Castro y la actriz que hace de FARA es de delito… que poco transmiten.
Por suerte, parece que los guionistas se han llevado a la parejita muuuy lejos y no los veremos en la siguiente temporada.
Bendita tienda de surf en Tarifa, que consigue alejar de Campohermoso a Lucas y Fara para dar paso a alguien que sepa interpretar algo. Y eso que estuvieron a punto de quedarse para ejercer una paternidad responsable jajajaja…