Axwell, Steve Angello y Sebastian Ingrosso son los tres productores y dj suecos que a finales de la primera década del dos mil fundaron un trío llamado Swedish House Mafia. Se hincharon a abarrotar festivales y cada canción que sacaban era un éxito más grande que el anterior. Es más que seguro que recuerdes alguno de sus grandes aciertos musicales. Los cientos de millones de visitas en youtube demuestran que su éxito fue mundial.
Arrasaban donde iban y su éxito los hizo buscarse tantos fans acérrimos como haters que detestaban lo comercial de su música electrónica. Se puede decir que representaron los últimos coletazos de la gran cultura de club de los noventa llevándola a los estadios y consiguiendo cosas como este temazo que ya es un clásico de la pista de baile como atestiguan los más de doscientos millones de visionados que acumula, que se dice pronto.
Pero cuando estaban en la cresta de la ola se separaron con varias versiones de los hechos; que si necesitaban libertad, que si era insoportable la presión de la industria por los sonidos nuevos, que si uno de ellos tenía fobia a los aviones y así no podían continuar…
Para sorpresa de todos, pasa una década entera y nos enteramos de que preparan su regreso con un disco nuevo. Hay miradas suspicaces entre el respetable, sospechas de que a solas uno a uno no se comen un colín…Pero es que encima también preparan gira mundial que comenzará ni más ni menos en Madrid por lo que se empezó a sospechar que iban en serio y tenían preparado musicón. La confirmación llegó con el temazo más grande que ha sacado The Weeknd en los últimos tiempos. Pena que no estuviera incluido en su último disco.
Hasta aquí todo lo que conocías de este trío y ahora te vamos a comentar la nueva canción para la que han contado con el perdidísimo Sting que se ha prestado para renovar un poco su carrera, apolillada de tanta gira de grandes éxitos y de volver a cantar las mismas canciones forever and ever. Lo malo es que lo hace para retomar el primer éxito de Police que todo el mundo sabe que es Roxanne, aquella prostituta de Amsterdam del Barrio Rojo. Y esa es la razón de que este nuevo refrito se llame Redlight y con razón, porque le han metido tal cambio que en realidad más que una versión es una canción nueva. Y no está pero nada mal. Sube el volumen!