Día Internacional de la Mujer: así piensan ellas

Hola:

Me apetecía hacer algo sobre el día de la mujer (aunque para mí como buen vintage que soy siga siendo el día de la mujer trabajadora). Así que me he preguntado ¿Y qué piensan ellas del día de la mujer? Porque la verdad, nunca se lo había preguntado a ninguna de mis amigas. Y mira, lo he hecho. A todas ellas les he preguntado qué significa el día de la mujer y qué creían que se debería hacer en un día como hoy. Y este es el resultado:

Marta, 39 años, responsable de comunicación: «Día de la mujer… ¿qué?

Yo crecí en los 90 cuando las cosas se daban por hecho: estudiar  con becas, estudiar una carrera, tener derecho a paro, sanidad pública… PUES CLARO. Y mis preocupaciones (y las de los que me rodeaban, ejem) no iban mucho más allá de ¿tengo dinero para este concierto? ¿Sala Siroco o la Maravillas? Y cosas así. Es decir CERO conciencia, ni falta que nos hacía.

De hecho mirábamos con cierto reparo a los que militaban en determinados compromisos “sociales”. Panda de antiguos. Jerséis andinos. Perezón.

Pero mira tú por dónde en 20 años cómo ha cambiado el cuento, y es ahora cuando estoy pagando la soberbia y el nihilismo tardonoventudo. Un par de gafas moradas se cosieron a mis sienes y ya no puedo ver el mundo (y mi país) de otra manera, porque esta es la única manera de ver el mundo. Y en el hipotético y simplón caso de que pretendiera argumentar que no hace falta un Día de la mujer trabajadora, incluso mi propio ombligo me gritaría: ES LA SITUACIÓN DE LA MUJER EN EL MUNDO, ESTÚPIDA.

Así que si, que no sólo hace falta, y no sólo por nosotras, sino por las que no lo pueden celebrar, por respeto y agradecimiento a las que lucharon antes que nosotras y porque se lo debemos a las niñas que aún no saben la que se les viene encima.  

Ana, 26 años, filóloga en paro: «Es nuestro «orgullo» particular, y no debería existir tal cosa en 2017″

¿Qué significa el Día de la Mujer (trabajadora) para ti?

Pues es una muy buena pregunta. Ya el simple hecho de que tenga que haber un «día de la mujer X» me parece significativo, porque no existe un «día del hombre X». Ello significa que quedan aún muchas, muchísimas cosas por hacer. Que exista este día quiere decir que, de algún modo que no alcanzo a comprender y que no se puede explicar, las mujeres seguimos siendo una minoría, un grupo excluído y, por eso, tenemos que tener y celebrar un día especial. Es nuestro «orgullo» particular, y no debería existir tal cosa en 2017.

Significa cosas que tanto oímos como que cobramos menos trabajando tanto o más, que no alcanzamos puestos de reconocimiento, que no se nos permite conciliar la vida laboral y familiar. Queda muy bonito decir que todos somos iguales, pero la cruda realidad es que no es así ni de lejos.

Respecto a la conciliación, que es sobre lo que más se habla respecto al día, es un tema quizá delicado. ¿Por qué son ellas las que tienen que pedir bajas, reducciones de jornadas, etcétera? Posiblemente sea porque ellas quieren: es lógico que tras haber albergado en tu vientre una persona durante 9 meses y que cuando nace sea un ser dependiente al ciento por ciento, quieras pasar el mayor tiempo posible con ella. Es decir, posiblemente esas bajas y reducciones las cojan, en resumen, porque les da la gana.

El problema es que no debería significar que la mujer tenga menor dedicación al trabajo, que vaya a trabajar menos o peor, que no pueda desempeñar sus labores. El problema real es que las empresas, normalmente regidas por varones, no saben cómo resolver el problema conciliatorio por una razón muy sencilla: son hombres. Ellos no tienen que renunciar a nada nunca, jamás en la vida, con lo que no ven lógico que una mujer sí lo haga para cuidar de su estirpe y no ven necesario o incompatible el tener hijos con tener que quedarte en casa. Se ve que creen que se van a cuidar solos. O así lo veo yo, como hembrista que me creo.

En resumen: tenemos un día de la mujer trabajadora porque somos la peste, porque por desgracia siguen existiendo muchísimos hombres que no consienten que una mujer pueda superarles al tener que ocuparse de trabajo, casa y familia. Porque podríamos, perfectamente, el problema es que no nos dejan. Prefieren tenernos de chachas y conejas a vernos como iguales. Porque tienen MIEDO.

¿Solución? Seguir luchando. No queda otra. Con un «parón de media hora» no se va a solucionar nada, se van a seguir riendo de nosotras. Seguir trabajando, seguir peleando, seguir ascendiendo, y todo ello estando orgullosas de ser mujeres porque, sin nosotras, ellos no son nadie.

María Bilbao, psicóloga: «El 8M es un modelo de visibilización de aquello que el feminismo defiende durante todo el año»

El 8m es una fecha de reivindicación feminista, para mi es también un encuentro con compañeras y un momento de visibilización de aquello que el feminismo defiende todo el año.

Creo que se debe hacer lo que se hace: manifestarse y también poner el foco sobre logros feministas y la herstory, denunciar la injusticia de género que aun existe. Los hombres deben acompañar a un lado y dejar el protagonismo a las mujeres.  Es un día de lucha y de protesta, no es un día para regalar flores, para hacer talleres de maquillaje, etc, que banalizan la conquista de derechos de un movimiento como el feminismo. Creo que se puede hacer una reivindicación alegre, divertida y que invite a más mujeres a sumarse.

Blanca, 41 años, entrenadora neuro-motivacional: «creo que todos los días son el día de la mujer y me pregunto si también hay un día del hombre» 

El día de la mujer para mí es un día más, porque creo que todos los días son el día de la mujer y me pregunto si también hay un día del hombre. Creo que es bueno encontrar el equilibrio. Parto de la base de que los hombres y las mujeres no somos iguales, nunca lo vamos a ser y yo no quiero ser igual. ¡Somos distintos, y maravillosa diferencia! Porque necesitamos que los hombres sean de una manera y las mujeres de otra, con todas nuestras divinidades y todas nuestras cosas a mejorar. Y sí que creo en el equilibrio, en el balance, que los hombres saquen su parte femenina y las mujeres su parte masculina.

Necesitamos hablar más en términos de equilibrio, la sociedad necesita la parte femenina, sobre todo en el mundo profesional. Tenemos que tener más vocabulario equilibrado y entender que somos un complemento y cada parte tiene algo maravilloso.

Satori, Profesora de idiomas: «El feminismo tiene que salir del gineceo»

El día 8 de marzo es una fecha normal, para mí. El feminismo es algo que se defiende cada día, reflexionando sobre los roles de géneros o desmontando estereotipos, por ejemplo… Intento hacerlo en mi profesión, con mis alumnos, y cuando haga falta, saliendo a la calle para defender los derechos de las mujeres.

Desconozco el origen de la denominación del “día de la mujer trabajadora”, pero creo que habría que acabar con este término despectivo…

El feminismo tiene que salir del gineceo, porque todavía tiene mala fama ser reivindicativa en muchos sitios.

Creo que podemos cambiar las cosas con acciones pequeñas como por ejemplo boicotear marcas de ropa que contratan de manera indirecta a mujeres trabajando en condiciones difíciles, como en Bangladesh. Algunas asociaciones feministas proponen eso.

Al final, el feminismo tiene que ser el asunto de todos, y si me permiten parafrasear a Simone de Beauvoir, diré que – “no se nace “feminista” se llega a serlo” … pero no solo una vez al año.

Carmen, 48, responsable de reclutamiento: «para mí no es un día festivo, sino reivindicativo»

El día de la mujer, para mí no es un día festivo, sino reivindicativo. Recordamos a mujeres que murieron luchando por sus derechos y se hace evidente que 160 años después todavía queda muchísimo por hacer.

Debería ser una fecha para hablar de feminismo de una manera cercana, menos elitista intelectualmente y más «de la calle»; para acercar a todas las mujeres al concepto de sororidad; para evidenciar micromachismos; para emponderar a las adolescentes; para atajar de raíz las webs y la publicidad que llevan a muchas mujeres de cabeza a los trastornos alimenticios; para gritar todos y todas contra esa lacra que es la violencia machista. Hay que acercar a los hombres al feminismo de manera urgente.

Ana, 47 años, jefa de proyecto: «no veo que de ningún hombre sin hijos se piense que es un egoísta o un ser incompleto si decide no reproducirse»

Hola alma inquieta. Pues yo no soy mucho de «días de» pero entiendo que tienen que existir para remover un poquito las conciencias. Como casi todas, supongo, he sufrido gestos de machismo directos e indirectos, desde cobrar menos por hacer el mismo trabajo que un hombre a que tus opiniones sean menos tenidas en cuenta en el ámbito académico y laboral, que te juzguen por tu aspecto, esto tanto hombres como mujeres porque o no eres lo suficientemente joven o guapa o todo lo contrario, si te preocupas un poquito por tu apariencia entonces te juzgan como frívola/tonta y nada más lejos de la realidad, hay personas a las que nos da la cabeza para rendir en nuestro trabajo y además elegir el bolso que combina mejor. Otras muchas cosas detestables que sufrimos las mujeres son el escuchar barbaridades desde que eres poco más que una niña o sufrir que cualquier baboso se crea con derecho a tocarte porque le apetece. Por no hablar del juicio que todo el mundo se cree con derecho a emitir sobre tu decisión de tener o no hijos, no veo que de ningún hombre sin hijos se piense que es un egoísta o un ser incompleto si decide no reproducirse. Sobre todas estas cosas creo que se debería reflexionar un poquito, porque aunque hemos nacido en la parte del mundo en la que no nos van a mutilar los genitales ni nos van a obligar a vestir como alguien decida ni te van a vender con 12 años, todavía estamos muy lejos de que la igualdad entre sexos( nada de géneros, el género para las palabras, las personas tenemos sexo) sea efectiva.

Tengo la suerte de formar parte de la tercera generación de mujeres de mi familia con estudios superiores y con un trabajo fuera de casa y aunque me consta que he tenido las cosas mucho más fáciles que mi abuela o que mi madre las dificultades no han terminado; ahora cuando ya he cumplido 47 resulta que en el mundo laboral soy directamente una vieja que ya no encaja en ningún sitio, si fuera un hombre lo tendría difícil también, pero un hombre con mi cv sería considerado senior yo soy vieja sin más.

Carolina, 42 años, diseñadora gráfica: «solo somos personas, no tenemos que demostrar ningún superpoder»

Para mi el día de la mujer es una forma de recordar a la sociedad que a pesar de los logros obtenidos a lo largo de los años y la valentía que han demostrado muchas mujeres aun tenemos que seguir celebrando un día para obtener algo de reflexión, ojalá no se tuviera que hacer esta mención en el calendario por que supondría que hemos alcanzado una igualdad.

Creo que se debería empezar por el cambio desde las propias mujeres, rompiendo con todos los pre conceptos que nos inculcan desde pequeñas, por que al final nos hemos quedado con todo, lo de antes más el tener que ser mas competitivas y profesionales y solo somos personas no tenemos que demostrar ningún superpoder sobre todo a nosotras mismas.

Miren, 36 años, librera: «Aquí somos todas mujeres»

El día de la mujer supone un día de llamada de atención respecto a la gran desigualdad que existe entre hombres y mujeres, háblese de salario, condiciones, garantías, etc., etc., etc. Y un día que es nuestro, y que hay que seguir luchando por el.

Me gustaría comentar que tengo miedo con actos como el de mañana de llamada a la mujer a que realice un paro. No creo que todas puedan hacerlo y no me gustaría que fuera un motivo de distancia. Creo que debería haber más solidaridad entre nosotros, y no tanta brecha “Soy feminista pero no soy feminazi”; “No entiendo nada”; “No sé de que van”; “¡Qué pesadas!”. Lo veo entre nosotras. Creo que no está llegando el mensaje. Me gustaría que fuera un día de solidaridad entre nosotras porque últimamente me da la sensación de que las mujeres nos perdemos entre tantas líneas de feminismo y de discurso feminista. Nos veo muy perdidas, y otras consiguen que la gente no sepa lo que es feminismo y se creen brechas entre nosotras. Aquí somos todas mujeres.

Mariasun, 68 años, jubilada: «Me da mucha pena que a estas alturas estemos así»

A mí me da mucha pena que tengamos que estar con estas mandangas todavía. Pero sobre todo lo que me da más pena es lo que está pasando con las chicas de ahora. Nos estamos haciendo mucho daño las unas a las otras y están echando a perder todo lo que consiguieron las generaciones anteriores. Me pone mala y me dan ganas de soltarles un cachete a las niñas que veo ahora diciendo que el feminismo no va con ellas. Me entran ganas de decirles “Bonita, cariño, que si puedes estar tú ahora enseñando la cacha es porque ha habido muchas que tuvieron que aguantar muy mucho para que tú pudieras hacerlo, y no pienses que por enseñar la cacha lo tienes todo hecho”. Pero me dan ganas de decírselo después de tirarles el móvil al suelo. El feminismo va con todas.