Los curas viajeros

La santa madre iglesia española es maravillosa, única, llena de candor y humanidad, derrochando amor fraternal allá donde pone el caliz, magnánima, generosa y misericordiosa con los pecadores y los afligidos. Tan generosa y desprendida es que pese a sus exiguas cuentas que apenas llegan a fin de mes con MIL CIENTO CUARENTA Y DOS millones que manejan las diócesis. Ademas, gracias a los acuerdos Iglesia-Estado, la institución recibe según algunas fuentes por parte del gobierno unos ONCE MIL MILLONCEJOS de na, de los cuales uno trescientos proceden de la declaración de la renta. Como cuando salen estos temas siempre hay alguien que se acuerda de Cáritas, hay que resaltar que la Iglesia solo aporta un dos por ciento según los mismos gestores de Cáritas.

Este análisis monetario es procedente porque sabiendo de su apurada situación económica (ejem) todavía es más sorprendente que a la santa institución no le duelan prendas en hacer todo lo posible porque algunos de sus trabajadores (los curas) tengas las mejores condiciones posibles para que ejercer su vocación y si hay que pagarles un viaje o un traslado para que tengan aires renovados, pues lo hace y santas pascuas. Que esos viajes ocurran cuando hay uno o varios casos de abusos de por medio es una puritita casualidad. Pero como intento no hablar sin pruebas, traigo unas cuentos ejemplos  de lo que digo. Comenzamos con un cura de Melilla al que los calores y los sofocos africanos le daban fatigas y por eso la Conferencia Episcopal pensó que era idea mandarlo a Yunquera (Málaga).  Dicen que lo hicieron por causas de salud…JA . Que el SOcerdote tuviera como costumbre drogar a algunas de sus amigas para luego abusar de ellas y rodarlas en vídeo no tiene nada que ver con ese traslado. Nooooo queeeee vaaaaaa.

 

Tengamos en cuenta que los abusos de este tipejo se conocían desde enero, la iglesia ni abrió una investigación y nueve meses después, nos enteramos de que lo único que hicieron fue…Trasladarlo. ..¡¡Son tan bonicos!!

Otro ejemplo es el del cura Juan Mari Mendizabal que recientemente ha sido nombrado vicario de Beasain. Por supuesto nos referimos a otro caso aislado con el tema de los abusos, unos abusos a menores que él mismo reconoció y por los que nunca cumplió condena aunque la propia Iglesia lo destituyó de su cargo como vicario general de Gipuzkoa. No está mal que pongamos su foto por si algún feligrés no lo conocía y se le ocurre llevar a su hijo a la parroquia de Beasain a que haga la catequesis.

 

 

Que no quiero hacer yo una regla de las excepciones y así que traigo otro ejemplo de Extremadura, que en eso la Santa Madrastra también intenta repartir para que así a todos (de una manera u otra) salgamos beneficiados con su gran labor. Hablamos en este caso de un cura condenado por posesión de pornografía infantil. Cuando se armó el Belén, por su traslado a Almoharín la diócesis de Coria-Cáceres salió en su defensa con argumentos tan convincentes como…

«Está rehabilitado y sostiene que el delito que cometió fue informático y que no tuvo contacto con menores»

 

De todas maneras si no es la iglesia, son las leyes tan laxas que tenemos al respecto y bien puede decirlo Edelmiro Rial, un cura que ejercía su apostolado en Galicia, más concretamente en Baredo. Este señor, acuso por abusos a SEIS menores. En 2003 fue condenado a 21 años de prisión pero en 2008 ya estaba en la calle por «buen comportamiento»…¿Mande? Buen comportamiento porque en la cárcel son todos mayores de 18 años, que si hubiera sido internado en un centro de menores, otro gallo le cantaría.

 

 

Que no se me olvide el caso de Ignacio Mora para que veamos que los mecanismos son distintos pero el final es el mismo. Este presunto estaba siendo investigado por otro tema de abusos y…¿Qué hizo la iglesia? En vez de ayudar en la investigación lo trasladó de Villanueva del Duque a Espiel porque…Ya está rehabilitado…Y si no lo está, que se preparen los que vayan a hacer la primera comuniñon, porque total, como si le importara una mierda si lo hace o no a la iglesia.

Con estos precedentes, Juan Manuel de Souza, acusado de abusar de menores usando la confianza de las familias, puede estar tranquilo porque nada le pasará y todavía si se descuida, lo hacen obispo. Este señor de la foto, me refiero. Un angelico al que se acusa de tomar ventaja por su situación de superioridad, respeto y confianza para tocarle los genitales por debajo de la ropa interior a la vez que se masturbaba. Pertenecía a los neocatecumenales, los kikos para más señas. Mas tierno…

 

 

Si todo este texto te genera dudas morales, hazle caso al Arzobispo de Valladolid y asunto arreglado.

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