Su Majestad Madonna Louise Verónica Ciccone alcanza de nuevo la cresta de la ola de la industria musical convencional, eso que se denomina mainstream. Tiene 60 años y no da señales de querer retirarse, cosa que es de agradecer a la vista de sus últimos trabajos.
Todos sabemos que está encantada de sembrar la discordia y ser fuente de polémicas entre los que ven en ella a una vieja gloria que se niega a envejecer con dignidad, como si la dignidad fuese un valor mensurable ni mucho menos apto para ciertas personas. Ella es una especialista en lo que llamamos coloquialmente liarla parda.
Cuando en 2019 presentó ‘Madame X’ , tras unos años de silencio, muchos pensaron que había perdido completamente el norte. No ya por las producciones musicales y las colaboraciones, algunas un poco cuestionables, sino por la imagen que la propia protagonista estaba dando de sí misma. Cuántos golpes de pecho, barbas mesadas y vestiduras rasgadas fue provocando a su paso. Justo lo que ella buscaba, pues de nuevo se situó en boca de todos desencadenando ríos de opiniones, comentarios y críticas en los medios, muchos de ellos cargados de veneno y envidia, claro.
En 2021 presentó otro disco, de nombre ‘Madame X Music from de Theater Xperience’ con veinte temas en directo tomados en sus últimos espectáculos. Alardeando de una frenética actividad, presentó Finally Enough Love a mediados de 2022, un disco con 16 remezclas de una selección de temas escogidos por ella misma entre todo su repertorio.
Es decir: de 2019 a 2022 ha presentado tres álbumes, con una pandemia y confinamiento de por medio. Que igual le ha volado un poquito la cabeza, pero oye, da gusto tener artistas con semejante capacidad. Quizás estas dos ultimas publicaciones sean un poco tibias porque no aportan temas nuevos y tal, pero quiero pensar que se trata de una especie de transición. ¿Hacia dónde? Pues al lugar donde se encuentra ahora mismo.
Donde yo quería llegar con toda esta palabrería es a su último trabajo audiovisual…. ¿Sinceramente? Me ha dejado sin palabras…. Lo he visto una y otra vez sin poder cerrar la boca. Aun no se como calificarlo para hacerlo con justicia, pues realmente me ha impactado.
Mezcla de un modo increíble iconografía religiosa católica para tratarla, al instante, con la mayor de las irreverencias heréticas. Kahlo, cuerpos esculturales y otros en las antípodas de tal concepto. Fetichismo, antigua Persia, alusiones más que explícitas a la tauromaquia (ahí te has columpiado, pero queremos entender que te quedas con la estética y no con el trasfondo sangrante)… Todo hilado de un modo que sólo ella podría concebir.
El trabajo artístico, que me recuerda un poco a Paradjanov, es impresionante aunque, si nos fijamos bien, ni ella toca la cítara y ni el chulazo del cello tiene idea de lo que está haciendo. Además, ya podian haber tensado un poco la primera cuerda, que casi se sale del puente…. Pero vamos, que un fallo de producción dentro de semejante orgía visual es del todo insignificante.
No quiero extenderme mucho más, así que ¡¡Dentro Vídeo!!
Nota: igual no podéis acceder directamente al video por un asunto de restricciones, pero no os preocupéis: si miráis atentamente la ventana de advertencia, tenéis un enlace que dice Ver en YouTube para abrirlo.
Ah, no creáis que pasamos de comentar su próxima gira, lo haremos a su debido tiempo. Aunque nos arden los dedos ante los precios de las entradas y, sobre todo, esos ‘gastos de gestión’….
Lo bueno se hace esperar, querides….
Yo no sé qué pedirle estéticamente a Madonna a estas fechas, ¿Que sea coherente consigo misma y nos recuerde su manierismo, sus referentes religiosos, estéticos, carpetovetónicos, espirituales y sexuales…o que vampirice alguna tendencia emergente musical como venía siendo costumbre, a lo Bowie en sus años mozos? Me he quedado un poco como en la drag race, cuando a la drag más estilísticamente versátil le dan el palo porque no tiene una imagen propia y a la drag más fiel a sí misma la atacan por falta de versatilidad (menos mal que Bianca del Rio se lo dejó claro clarinete en un roast). Necesito resetear mi «mindset» y espero que Madonna me de el tute necesario para limpiar semejante atasco mental. Nena, necesito un nuevo lore. El trabajo de VF de esas cosas que te desarticulan la mandíbula.
En cuanto al reciente «blackout» (que no es tal) en su discografía… son muchos factores, y no sólo el agotamiento de la fórmula Madonna -aún hay gente que creemos que hay Madonna para rato-.La aparición de una nueva generación de divas (Dua Lipa, Rosalía…) que no juegan en la misma liga que la ambición rubia (es lo mismo, pero no es lo mismo), ha captado a los millennials en sus estertores y a los nuevos centennials ha fragmentado mucho la audiencia potencial. Por otro, moderle la manita a Warner…chica, parece que no te acordaras de Prince. Lo ha intentado y creo que ha tenido relativamente éxito, pero no ha sido un órdago para la discográfica. En el tema colaboraciones (la sangre fresca de la que se nutre) ha flopeado un poco, y en la carrera de las divas los resbalones son fatales, con esos taconazos…
La referencia a Paradjanov, es pura fantasía. Gracias. Lo desconocía, pero la primera sinapsis que me ha saltado al ver el vídeo ha sido «Losing my religion». Ta lue!
Como siempre, Juanjo, tus comentarios son gloria bendita.
Paradnajov es un gran olvidado (u oculto) que se debe reivindicar.
Gracias mil.
Pues parece ser que el chulazo del cello si que sabe lo que hace …
Si es que Madonna sabe lo que se hace
Pues de verdad que no lo tengo tan claro…. La posicion de los dedos en el mástil y esa primera cuerda tan floja…..