¿De qué sirve un corazón encerrado en una urna de cristal?
Esta podría ser perfectamente la frase de presentación de El Plumas. Seguramente habrá quien catalogue la novela que os traigo como una más: la típica donde un adolescente gay, solitario y atormentado, cuenta las circunstancias que rodean su vida desde dentro el armario, y su travesía hasta nuestro lado del arcoíris. Muchos de nosotros hemos sufrido en nuestras carnes el miedo, la soledad, la angustia por la presión familiar y ambiental, incluso la violencia en forma de acoso, de maltrato propio y ajeno al sentirnos un bicho raro, la anomalía, un fraude al fin y al cabo.
Definitivamente no es así porque David Pallas nos conduce por los círculos del infierno personal de nuestro protagonista de otra manera. Una serie de acontecimientos sitúan a Quique ante los caminos de la diversidad en toda su amplitud, donde se le presenta una realidad amable y luminosa que le acoge sin ambages, consiguiendo además que, a su paso, otros compañeros de la historia logren también abandonar para siempre sus abismos personales.
Este viaje hacia la identidad lo hemos recorrido casi todos: unos con éxito, otros no tanto. Los menos (espero que realmente sean pocos a pesar de lo que nos vamos encontrando por ahí) aún se resisten en el fondo de sus cavernas, recocidos en la represión y la negación de algo tan maravilloso como es la naturaleza humana cuando permitimos que brille sin ataduras. No quiero extenderme mucho más por puro temor a desvelar detalles, pero diré que las personas -bueno, casi todas- que acompañan a Quique en este viaje son tan maravillosas como los escenarios donde transcurre la historia.
Pero ¿Quién es el autor? Pues un maño de treintaytantos que lleva muchos años dedicado a la educación, profesión que intercala desarrollando otras artes como la música, el teatro, la ilustración y la literatura. Todo un portento de hombre que, además, ejerce el activismo LGTBIQA+ impartiendo charlas contra el bullying y la LGTBfobia en centros educativos y a través de las Redes Sociales. El Plumas no es su primera publicación: tiene una novela gráfica titulada Los Príncipes Morados, un dossier educativo para trabajar, tanto en las aulas como en los hogares, sobre la realidad LGTBIQA+, el guion de la webserie Despedidas dirigida por él mismo y, por si fuera poco, tiene un canal de literatura juvenil en Youtube llamado Le Petit Davidlie Poulain. Le deben faltar horas en el día sin duda.
La obra ha sido editada y publicada por Siete Islas Editorial en su colección Octava Isla y la encontraréis en vuestra librería de cabecera. Si no la tuvieran, podéis encargarla. Ya sabéis cuanto nos gustan las librerías tradicionales.
Podéis seguir a David en las redes sociales pinchando aquí, aquí y aquí.
Es, sin duda, una obra que deja un buen sabor de boca y que tambien debería formar parte de los programas educativos de la enseñanza secundaria, como tantas otras que hemos comentado en nuestro espacio. Lo mejor es que, con los precedentes que tiene David, no creo que tardemos mucho en disfrutar de alguna novedad literaria, y estaremos encantados de leerla.
Muchísimas gracias por una reseña así de maravillosa y por tu amabilidad y cariño al nombrar mi trabajo. Un abrazo enorme!! ♥️