Se ha dicho muchas veces que una buena fotografía puede ser producto de mucho trabajo previo o de una afortunada casualidad. Y yo creo que una buena fotografía también puede nacer de mucha paciencia y de un ojo clínico para encontrar esas sincronía visuales que ocurren a veces. Ese es el espíritu del proyecto Coincidencia de Denis Cherim, protagonizado a partes iguales por la fotografía urbana y la naturaleza.
Las imágenes hablan por sí solas.
«La fotografía es la herramienta definitiva para inmortalizar los instantes que vivimos. Prestando la máxima atención a los detalles que configuran su esencia, es posible capturar el momento y convertirlo en un recuerdo imperecedero. Cada segundo que vivimos es único e irrepetible, de modo que conservarlo en la medida de los posible es casi necesidad vital.
En mi caso, es a través de la fotografía como mejor he conseguido expresar mis emociones y mi pasión artística, del mismo modo que otras personas lo consiguen trabajando con palabras o notas musicales. En cada una de mi fotografías me esfuerzo por capturar instantes conservando su esencia, tal y como fueron disfrutados por las personas que los vivieron, y ser así capaz de crear belleza a partir de la felicidad.»
(Fuente: www.denischerim.com)
Para ver (y saber) más: Twitter, denischerim.com, Flickr, Facebook y denischerim.info.
Es como el Magritte 2.0 de la fotografía…Osea, una puta maravilla.