Primero nos quedamos con las frases que se graban a fuego y repites a tus amigas para fardar («tengo una cola que da la vuelta a la oficina») y ahora llega el vídeo, para que la canción poco a poco te vaya empapando, que es algo que pasa mucho con Chico y Chica, que al principio no te dicen mucho y luego nho te los quitas de encima. Por supuesto es un vídeo ultrapanorámico con un dispendio de pelucas y paleta de colores que no está al alcance de todos, solo de este par de vascos al que es imposible no adorar.