Hay artistas que nos encantan, y a las que sólo podríamos calificar de locasdelcoño. O visionarias. El tiempo nos lo dirá. En esta congregación, hay gente que le reza a Björk, la esquimala esquizofrénica. Yo le rezo a Nuestra Señora de Los Trapitos Sencillos, Miss Murphy. Roisin, antes que Annie, antes que Lady Gaga, era capaz de ponerse una pantalla de lámpara como tocado y llevarlo con la misma naturalidad que tu abuela los rulos y la bata de guata. Ella es así.
Para su próxima reencarnación, («Take Her Up To Monto», o «THUTM» para los amigos), se deja el look de actriz-ochentera-venida-a-menos que ha llevado en los vídeos de «Hairless Toys», y nos sorprende con su outfit obrero, como si acabara de salir de una fiesta temática gayer del Soho… Y esperábamos con ansia su regreso al redil, esperábamos como agua de mayo una segunda parte de «Overpowered», que no va a llegar. Al igual que «Ruby Blue» no tuvo continuación. Si te sorprende, creo que no le cogiste el pulso a esta señora cuando estaba en Moloko, donde cada lp era distinto, conceptualmente hablando, al anterior. Así que si buscas con ansia a la Murphy que te hizo bailar en la pista, consuélate con las colaboraciones que ha hecho (y espero que siga realizando) con gente como Mason, Boris Dlugosch o Hot Natured y trata de disfrutar de los nuevos derroteros. Yo la espero con ansia.
Los mismos ojitos de loca que su tía Petra, igualita, igualita.
Cierto es que yo soy de lo que espero a la Murphy más movida, pero las apuestas en las que se mete son dignas de ser escuchadas en lo general