«¡Como si no nos pegaran bastante!» decía Carla Antonelli hace dos semanas en La Sexta Noche.
A la vez que las palabras de Carla Antonelli nos llegaban a muchos y le resbalaban a los de siempre, conocíamos la historia de Dandara, transexual de 42 años apaleada hasta la muerte en Brasil el mes pasado (ojo, hay imágenes muy gráficas, pueden herir tu sensibilidad). No fue un autobús naranja el que le pasó por encima pero sus asesinos habían sido alimentados por el mismo combustible. En el maletero del autobús de HazteOír va el cadáver de Dandara.
A plena luz del día y con la complicidad de un secuaz que lo grabó todo con el móvil sacaron a Dandara de su casa y la apalearon hasta la muerte. El video sale ahora a la luz porque la policía necesita ayuda para encontrar a dos de los asesinos, la misma policía que no atendió a las llamadas de algunos de los vecinos que presenciaron la paliza.
Mientras un puñado de cínicos se escudan en una mal llamada «libertad de expresión» para negar la existencia a miles de personas, ponen en manos de otros tablas, ladrillos y pistolas. Porque ese puñado de cínicos sabe que no tiene que mancharse las manos, que ya tienen a sus peones criados a base de odio para hacer el trabajo sucio.
Increíble y tristísima noticia, pero es necesario difundirla, por dura que resulte… me pregunto si tendrá que pasar algo así en España para que el Ministerio del Interior se plantee revocar la declaración de utilidad pública a sus amigos de Hazte…lomirar y su infame autobús. El otro día el ministro Zoilo (del Opus) en unas declaraciones al respecto, no se mostraba demasiado entusiasta con la futurible revocación, que ya piden a gritos desde muchos sectores. Esperemos que no haya que llegar tan lejos. ASCO DE PAÍS.
En la entrada de La discriminacuon de los heterosexuales, el sr MM adjunta el link de change.org pars solicitar la retirada de prevendas de utilidad publica de los del bus de la vergüenza ajena. Vamos casi por cincuenta mil firmas.
Horrible la muerte de Dandara. Estará siempre en mis pensamientos. Ojalá esté descansando en paz y que sus asesinos no descansen nunca.
Y bravo por Carla Antonelli. Su valiente legado perdurará siempre.