Las debilidades de Sense8 eran evidentes en la primera temporada aunque te dejases fascinar por una historia que aguantaba a duras penas el umbral de credibilidad. Como siempre, la prueba de fuego vendría con la segunda temporada…¿Dónde querrían llegar los Wachowsky? ¿ Hacia donde iría una trama tan compleja y con ocho personajes protagonistas a los que hay que darles una historia y un destino? En la primera temporada hubo tiempo para presentarlos de sobra, ahora tocaba evolucionar. Entonces, tras más de un año de espera, nos regalan un episodio navideño de dos horas en vez de la esperada segunda temporada y la verdad es que se me ha quedado una cara de tonto que pa qué.
Porque los defectos de la primera temporada no han hecho más que crecer y novedades he visto poquitas. Los momentos anuncio de Coca Cola o Benetton se han hecho más largos y hay minutos enteros donde parece que la trama les importa un pepinillo si la imagen multicultural chupiguay queda bonita. Es decir; un puto videoclip. Porque vamos a ver…¿Otra orgía era necesaria? Con lo chula y sorprendente que quedó en la primera temporada y esta vez ha sonado a truco que ya nos conocemos y huele. En dos horas, los personajes no han evolucionado, no ha pasado nada más allá de lo que ocurre en su vida diaria, ni sabemos más de su conexión, de los peligros que les acechan o si tienen alguna misión; es decir, andan perdidos, con el peligro de que se pierda con ellos una serie que parecía tan prometedora y va a ser que no. Soy pesimista y mi pálpito es que lo mismo que la adoramos, renegaremos de ella en el 2017, a lo Heroes. A ver.
No lo he visto y no puedo opinar. Pero volveré y opinaré cuando lo vea
me quedo calladita más mona, que no la he visto, pero eso de una orgía ayyyy eso no me lo puedo perder.
Es que el capítulo especial de Navidad es una tomadura de pelo, parece que han juntado dos episodios de la nueva temporada y los han emitido juntos. Y sí, prácticamente no pasa nada. Algunos personajes, como la india o el chico africano, han quedo en meros comparsas sin gracia. A ver si se toman en serio las tramas de la segunda temporada.