El otro día ocurrió una cosa bien curiosa; en Versión española progamaron «Una pistola en cada mano» y resulta que durante toda la noche se convirtió en TT en Twitter. Esto no es símbolo de nada, pero sí un síntoma, porque no es la primera vez que le ocurre a una peli española que se estrena en televisión y que en su momento pasó sin pena ni gloria por la taquilla.
Que Cesc Gay es nuestro Woody Allen particular, que dirige a actores como nadie y que tiene un olfato y una inteligencia pa los dialogos que pa qué, yo ya lo sabía ( ¡¡Que grande Krampack!!)…¿Pero lo sabe la gente? Aquí no, pero viendo las ventas internacionales que tuvo la peli, es posible que en otros países del mundo ya lo vayan sabiendo ( el cartel de arriba es de su presentación en Holanda). Y entonces va la televisión, la emite, y la gente, fuera de prejuicios y de tontás anticine español, la disfruta.
Recuerdo la noche en que emitieron «La voz dormida» y de pronto Twitter se volvió loco…¿Pos no quedamos en las pelis guerracivilistas no molaban o como va eso?
Esto viene porque en este momento hay una peli en cartelera que va por el mismo camino; Todos están muertos, una apuesta novedosa, distinta, con una mirada muy particular y que está pasando desapercibida por la taquilla pese a su éxito en el festival de Málaga. Y me da una raaaabia. Los prejuicios, de nuevo.
Todos están muertos tiene a una Elena Anaya en la cumbre de su carrera; esplendorosa, absoluta y mágica (y eso que su papel es de lo más desagradable y antiempatico). La peli, además, es seguramente el mejor homenaje que se le ha hecho a la movida española, pero lejos de topicazos y temas resobados se centra en los restos de lo que fue, esa gente que no ha podido superar el ser estrella fugaz y ahora se debate entre el patetismo y el ridiculo; un personaje extrapolable a taaaantos ámbitos; seguro que ustedes conocen a más de una persona así. Son la Norma Desmond de la modernidad pop y las secuelas que dejan las drogas.
Beatriz Sanchís, la directora, no acaba de rematar la peli y hay momentos pelín muermos, pero nadie le puede quitar merito a su propuesta novedosa y con una mirada muy personal y distinta. Porque eso de mezclar en una misma peli movida madrileña y realismo mágico…Como les digo; realismo mágico que no es una anécdota…¡¡Es muy importante en la trama!! Pero por supues que por aquí no voy a desvelar nada más. Tendrán que verlo ustedes. Vayan al cine y denle una oportunidad, que se lo merece.
Sabía que te gustaría! Cierto es que tiene momentos flojos, pero otros para mi gusto los compensa con creces.
Y la media hora final es MARAVILLOSA Y EMOCIONANTE. Panzón de llorar, oiga.
Pido, exijo, que Elena haga + cosas fuera y supertriunfe!