Adiós a nuestra musa, la gran Cynthia Plaster Caster

Acaba de fallecer una de las artistas que más ha inspirado a este blog, musa y diosa, señora que supo abrir el camino de tierra cuando ninguna mujer lo hacía, marcando una ruta que luego muchos seguiríamos con los ojos cerrados y el culo abierto. Se trata de Cynthia Plaster Caster, que a lo mejor no te suena de nada pero el nombre artístico ya debería darte más de una pista. Esta artista logró fama mundial a finales de los sesenta y setenta y fue tanta que hasta el grupo KISS le dedicó una canción:

Su legado ha llegado a nuestros días y puedes saber más con varios documentales dedicados a la figura como el que encontrarás en Netflix llamado Plaster Caster. A documentary.

Un logro que consiguió haciendo algo que muchos ya hubiéramos querido como trabajo y poder cobrar por ello, y  es que Cynthia se especializó…¡¡En sacar moldes de la polla de músicos famosos!!

Juntaba así dos de sus aficiones más queridas y una de ellas era la música. Sus primeros pasos  fueron de flacidez hasta que encontró al bueno de Jimmy Hendrix en un hotel y se presentó voluntario. El resultado es una obra a la altura de la Capilla Sixtina.

Para que entiendas el logro artístico es interesante que compruebes el calibre de la obra resultante en proporción a las manos de la artista.

Cuenta la leyenda que la artista no había tenido en cuenta los pelos del pubis y al tratar de arrancar el molde hecho de alginato dental  (un material manejado por los dentistas) le arreó unos tirones que dicen que ahí Hendrix inventó su famosa copla;

 «Como quieres que tenga

pelos en el coño

si me arreas unos tirones

de mil demonios»

 

El impacto de la obra confirmó los rumores de que Hendrix tocaba tan bien la guitarra porque estaba acostumbrado a manejar el tamaño XL desde que era bien niño.

via GIPHY

Viendo el filón la mujer se especializó en el tema y todos los músicos quisieron su molde. A ella le tocó ir de camerino en camerino con el reto de mantener la cosa dura pese a que el alginato dental se ponía sobre el miembro bien frío, así que dejo a la imaginación del lector las técnicas que esta buena samaritana de la música usaría.

Con el hándicap de que muchos de los músicos luego no aceptaban donar su obra y querían llevársela a casa, aunque mucho me temo que huele a que vieron que la reproducción era tan poca cosa que les daba vergüencita, pero aun así su colección es para que se te haga la boca agua.

Desde luego fue una mujer que demostraba que siempre disfrutó de su trabajo.

Llegó a acumular más de sesenta moldes y exponer en el MOMA porque entre sus modelos se encontraban músicos tan reputados como Jello Biafra, Chris Connelly, Wayne Kramer o Jon Langford  y aquí van algunos ejemplos que te gustará conocer.

Eddie Brigati

 

David Yow

Richard Lloyd

 

Wayne Kramer

 (a la derecha. A su favor la artista contó que se rompió el molde y que la cosa era más grande que la apariencia de la obra)

 

A su muerte deja la Cynthia P Caster Foundation dedicada a ayudar monetariamente a músicos con apuros económicos, lo que demuestra que por muchas risas que te puedas echar y por mucho que se te abra la boca al ver su legado, detrás de esa cabecita y esa sonrisa que parecía disfrutar tanto de su trabajo, había una figura artística a tener en cuenta porque además a estas alturas del siglo XXI casi parece imposible que se pudiera repetir un caso similar.