Me colé en una fiesta

….. Y quedé ABDUCIDA de los nervios .….

 

Estaba yo en casa tranquilamente, tratando de vaciar la cabeza de toda la rutina de la semana y no pensar en nada especial a pesar de ser viernes cuando recibí un wssp de una deesas amigas adorables, de muy mal pelaje, que siempre proponen cosas interesantes.

<<Nena, que te vengas a Chueca pero ya, que hay montada una que te cagas en El 12>>                         Así: sin más detalles.

Como realmente no tenía nada que hacer y la pereza estaba a punto de apoderarse de mí, le dije que sí. Me puse cualquier cosa, pillé la moto y en veinte minutos estaba aparcando en la misma plaza de Pedro Zerolo.

La puerta auguraba algo grande: un bullicio importante y mucha gente con chismes brillantes, ropa galáctica y lucecitas por todos lados.

Noté un rayo tractor que tiraba de mi hacia dentro y me dejé llevar. Lo primero que me hicieron fue recibirme comiéndome los morros con plus de electricidad, poniéndome una copa en una mano y una lucecita en la otra: mi amiga estaba esperándome con toda la artillería bien dispuesta.

Una atmósfera como de nave espacial flotaba en el aire donde todo vibraba con una intensidad increíble. Aquello no iba a ser una noche de viernes al uso, sino un fiestón sideral.

EL 12 estaba a reventar de gente desde la antesala, como hacía mucho tiempo que no lo veía. Según iba avanzando hacia el interior, la música y el buenísimo rollazo de la gente me trasladaban a aquella cantina de la primera entrega de Star Wars: Venusianos por aquí, una Replicante por allá, el Cíclope de los X-Men mirándome tras sus gafas de una sola lente, una malvada de V apuntándome con su fusil láser, una especie de Barbarella… Mucha gente bonita y radiante con la sonrisa en la cara, bailando sin parar.

Al fondo, en el puente de mando, dos seres verdes manejaban los controles de la nave: los increíbles The Rocket Boys haciendo saltar rayos de plasma entre la gente como si fueran bobinas Tesla.

De repente fuimos abordadas La Ogra que Todo lo Logra, quien nos poseyó y nos esclavizó a todas implantándonos unos chips multicolores con ayuda de Silver Edu Pé: la culpable de toda esta perturbación interestelar.

Al rato, unas inquietantes Bene Gesserit consiguieron recuperar el control y se apoderaron de los mandos: mis queridas Vurdalak DJ’s agitando la noche como solo ellas saben hacer.

La música alucinante nos fue atrapando en una espiral, elevándonos hacia una nube de luz llena de caricias, abrazos y más besos, muchos besos. Gestos cariñosos y hasta un mordisco perturbador en ese punto exacto que pocos conocen y desarma por completo…

Encuentros, presentaciones, confidencias y muchas risas entre amigos de siempre y otros nuevos. Personas que se besan, se abrazan y se acarician porque hay calor humano de la mejor calidad: lo que abunda en este sitio tan especial que ya supone parte de nuestra casa para muchos.

No es un garito más de Chueca, es

El 12 Club

Gracias al equipo por sorprendernos de esta manera. Lo mejor es que esta ha sido la primera de una larga serie de fiestas mensuales para recordar.

♥ ABDUCIDAS 
for
ever

5 comentarios en “Me colé en una fiesta”

      1. Juambe Muñoz

        Luego dice que le ha patinado la rueda de atrás porque la gente es muy mala y tira pañales en la calle… Qué mala, la gente.

        1. A ti si que te patina el bendix, el carefree y las horquillas…. ¿De donde sacas lo de la rueda de atrás? par dos que tienen las motos vas y te quedas con la que no es XD

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