Sí, ya sé que David O. Russell es, desde hace unos años, uno de los niños mimados de Hollywood y, en especial, de la Academia. Pero a mí es un director que me da mucha pereza. Porque creo que siempre nos vende la misma moto cambiándole los colores.
Cuenta siempre lo mismo. De la misma manera. Con los mismos recursos. Escondiéndose tras una recreación histórica impecable (ya lo hizo en La gran estafa americana y vuelve a suceder ahora en Joy) aunque exacerbadamente americana. Pero, sinceramente, creo que no tiene nada nuevo que contar. Ni siquiera tiene una manera nueva de contar lo de siempre.
Así que Joy es la pereza absoluta.
Lo único que funciona es la innegable química en pantalla que tienen Jennifer Lawrence y Bradley Cooper. Explosiva. Pero es que hasta la propia Lawrence (bastante sobreactuada) está aquí bastante cansina. El resto de actores tienen la mayor parte del tiempo un aire de pasaba-por-aquí.
Hay algún momento de luz. Hay, incluso, algún atisbo de emoción. Por supuesto. Pero el resto, en general, son muchos minutos de mucha pereza.
No puedo estar más de acuerdo con todo lo que dices en el post. Nunca voy a entender como este director tan insulso y torpe se coloca en todos los premios. Es que no salvaría ni una película suya, y esta es que ya paso, directamente. Se acabaron las oportunidades, hombreya.
Yo he sido incapaz de acabar de ver ni «El lado bueno de las cosas» ni «La gran estafa americana». Esta es la única que he acabado.
A mi me gustaría que la Lawrence dejase de interpretar a mujeres mayores de lo que ella es. Bueno, y ya puestos el resto de actrices jóvenes en general. Pero luego que si no hay sexismo y blabla.
Pues totalmente de acuerdo. Esta película me ha dado mucha pereza. Todo lo que pasa es un continuo «algo bueno, pero…» hasta el momento final. Los personajes que más peso tienen a excepción de Joy son unos cabronazos El desenlace es en plan «podría haber hecho esto antes, pero no lo he hecho porque las patatas fritas están muy buenas». Por favor. Espero que Jenniffer Lawrence no tenga una relación con David O. Russell tan cansina como la de Johnny Depp y Tim Burton. Que al menos de esa última ha salido alguna que otra película interesante.