Pablo Canosales y «La Necesidad del Náufrago»

¡Ay, chica, de vez en cuando esto de ser bloguera te da satisfacciones! Como por ejemplo que se ponga en contacto contigo (=conmigo, que tú no eres bloguera) Pablo Canosales para invitarte a ver su espectáculo “La Necesidad del Náufrago”. Así, sin tú pedírselo ni ná, y sin canapés, que se ha enterado que estás a dieta. Un amor de chico, vamos.

(Suena música romántica; se ve al autor de la entrevista comprando lencería con filtro amarillento, rollo Sara Montiel, sonriendo cual personaje de The Good Witch). 

Te preguntarás que quién es Pablo Canosales, y no te preocupes, que te lo va a contestar él mismo, porque muy amablemente ha accedido a responderme unas preguntas antes de que vayamos este domingo a ver la obra en el Teatro Alfil a las ocho y media, mi marido y yo.

Yo, intentando colarme en el backstage

via GIPHY

Mi marido, desde que le he dicho que íbamos al teatro

via GIPHY

Pero bueno, a lo que vamos, que me pongo a hablar de mí y no hablamos de Pablo. Pablo es este mocetón:

pablo-canosales-iloveimg-compressed-iloveimg-resizedPablo, ¿Qué tal?

Pues bien. Aquí intentando descubrir de qué va esta entrevista tan particular y atroz.

Háblame de ti

Soy Pablo Canosales. De Almonte (Huelva) y soy un teatrero desde que tenía uso de razón. Aunque no sé si he tenido algo de razón alguna vez. Posiblemente nunca. No sé si llevo razón en esto que estoy diciendo ahora mismo.

¿Y cómo te dio por hacerte dramaturgo y director de teatro?

Pues por la necesidad de hacerlo. Es una profesión muy difícil, supongo que como todas, y siempre he querido trabajar en esto. No me iba a quedar esperando en casa a que viniesen los proyectos a mí (porque eso no iba a pasar) así que me puse yo en marcha a generar cosas. Surgió así SIETEATRO PRODUCCIONES.

¿Qué es más difícil, escribir o dirigir?

Creo que escribir. Pero tampoco concibo la escritura sin la dirección posterior. Van de la mano. Supongo que por mi experiencia en estos años. No podría separar ninguna de las dos.

La profesión del autor teatral es muy difícil. Está en soledad y es complicado mirar de frente al folio en blanco. Sin embargo, cuando diriges, te encuentras con todo un equipo al servicio del espectáculo y es más fácil la creación. Al menos, eso me parece. No me concibo el teatro en soledad, sino con un equipo.

Posiblemente esta argumentación pueda cambiar. No son verdades absolutas. Cada nuevo espectáculo te pone entre las cuerdas. En un proyecto puede ser dificultosa la dramaturgia pero en otros puede ser la dirección. Un nuevo proyecto es un nuevo comienzo. En nuestra profesión no hay fórmulas exactas.

Vale, ya hemos hablado mucho de ti, vamos a hablar de la obra, ¿qué nos vamos a encontrar?

Pues una obra sobre las necesidades. Un viaje por la vida de muchos personajes que necesitan cosas. Algunos lo susurran, otros lo dejan ver y otros directamente lo gritan. Vais a encontrar una obra con muchas historias. Muchas piezas de un puzzle que será reconstruido por el espectador a la salida del mismo. Diferentes sketch en los que se deja ver la comedia, el drama, la nostalgia o el realismo mágico. Creemos que es un viaje apasionante sobre muchas cosas que nos importan y que necesitamos contar. Por tanto, el espectador quizás también las necesite. «La vida va de eso, de necesitar».

En la publicidad salen los actores (monísimos todos por cierto) como su madre les trajo al mundo, pero con más pelo, que siempre está muy bien. En este blog estamos muy a favor del pelo. ¿Se pasan así toda la obra? Te lo pregunto porque yo soy muy de calores, y si tenéis la calefacción alta para que no se congelen no llevarme el forro polar…

Pues no. No se pasan así toda la obra. Podrían resfriarse…

La verdad es que los náufragos sólo necesitan llegar a tierra firme y beber agua. Lo básico. Nosotros queríamos mostrar en este cartel lo básico de nuestros «náufragos». Ni trampa ni cartón. Nada de artificios para mostrarnos tal y como vinimos al mundo… Aunque algo más mayores…

banner-principal-1

Vale, pero entonces ¿de qué va “la necesidad del náufrago”? porque yo pensé que era una cosa porno y eso… 

¿Porno? Creo que el espectador no sabe muy bien a lo que viene. Viene buscando una historia y se encuentra con muchas. Quizás viene buscando la risa y se encuentra con otras muchas cosas. Y quizás viene buscando un momento de distracción sin más y lo que se genera es un momento de atención mayor por su parte para entender la obra. El teatro debe sorprender y realmente ahora nos está ocurriendo algo muy pero que muy bueno. La gente se sorprende cuando sale de la sala. Mayormente para bien. Y eso es bueno. El espectador no es pasivo. Cuando planteas un «nuevo juego» y él es parte activa de la representación, es muy enriquecedor porque debe descifrar las reglas del juego.

Y además me ha dicho un pajarito (Mentira, me lo has dicho tú) que ampliáis fechas hasta diciembre, ¿correcto?

Pues continuamos contentos y felices porque la respuesta de público y de prensa está siendo muy buena y la obra está siendo muy bien recibida. Es muy bonito cómo va creciendo tanto tras casi dos años desde su estreno. En diciembre los cumpliremos…

Bueno, Pablo, que no te quiero robar mucho más tiempo. No sé si lo sabrás, pero en atrozconleche vamos a inaugurar una sección de entrevistas rápidas con diez preguntas muy en la línea del blog, ¿Te apetece ser nuestra primera víctima?

Vamos a ver, porque no me fio…

Bien, pues aquí está nuestro cuestionario atroz:

  1. ¿Superhéroe favorito? Mi madre.
  2. ¿Lloras en las salas de cine o te reservas las lágrimas para la tele de casa? Lloro en el cine.
  3. ¿Eres más de primarias o de dedazo? Soy más de la ESO. Y los dedos los uso para otras cosas, aunque el dedazo en España está más a la orden del día que la Coca Cola Zero.
  4. ¿Cómo llamarías a tu biografía? ¿Tanto dará mi vida de sí como para una biografía?
  5. ¿De carne o de sangre? A mí la carne al punto. Que me da repelús ver tanta….
  6. ¿Cuál es la canción que no se te va de la cabeza ni con salfumán? Verano, verano. De El Fary.
  7. ¿Prefieres dormir tranquilo o llevar la razón? Prefiero llevar la razón tranquilamente en la cama.
  8. ¿Qué harías si estuvieras en un cuerpo del sexo opuesto durante pongamos, tres horas? … ¿Me tocaría?
  9. ¿El mundo se acaba y tienes que elegir a tu compañero de viaje para salvarte. Elige: Leticia Sabater, Justin Bieber, Chelo García Cortés o Pitingo? Pitingo sin duda. Aunque yo soy mucho de Leti.
  10. ¿Cuál ha sido el mayor fracaso sexual en la cama que has tenido? Ahora vengo. Voy a solucionar algo que no solucioné en mi adolescencia.
  11. ¿A quien le darias con un bate en la cabeza? (o “Harías un Negan”, como se dice ahora). Creo que a nadie. Aunque alguno que otro lo necesitaría. No sería yo el que usara el bate. Prefiero la autolesión.
  12. ¿Cuántas veces has pensado «pero que mieeeeeerda es esto» y has sonreído y asentido con la cabeza haciendo dar a entender que es genial? Alguna que otra. Pero se me nota en la cara. No lo puedo evitar.

Y hasta aquí se acaba la entrevista atroz. Ha sido un auténtico placer conocer a Pablo y, como siempre, haremos una crónica de la obra la semana que viene. ¡Permanezcan en sintonía!

2 comentarios en “Pablo Canosales y «La Necesidad del Náufrago»”

Los comentarios están cerrados.